El Universal
Integrantes de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) están en un intercambio de gases.
A 100 metros de la Universidad Autónoma Benito Juárez se da el enfrentamiento, donde se miran tanquetas, escudos y cascos.
En los 160 días, éste es el enfrentamiento más directo y abierto de las fuerzas públicas contra la APPO.
Los jóvenes que apoyan a la APPO rescatan las bombas y las regresan.
Miles de elementos dela PFP permanecen frente a cientos de appistas que resisten tirando piedras.
Hay autos incendiados.
Oaxaca llora
Antes en días pasado, un oficial dijo que no entrarían, que respetarían la autonomía.
Cohetones, tres helicópteros. El último bastión de la APPO en la universidad está siendo desalojado.
Nada funciona contra las fuerzas públicas federal.
Hoy es el día cuatro después de que la PFP ingresara y retomara Oaxaca.
La glorieta Cinco señores es el punto de enfrentamiento más álgido desde que las fuerzas ingresaran a Oaxaca.
Contienen, lanzan gases lacrimógenos con el objetivo principal de tomar la Ciudad Universitaria.
Helicópteros sobrevuelan bajo, lanzan lacrimógenos.
Miles de pobladores, de integrantes de la APPO cubiertos con pañuelos, con camisetas, resisten, regresan el lacrimógeno, el enfrentamiento en tierra y aire lleva más de cumplir tres horas.
Lanzan chorros de coca cola, de vinagre.
Radio Universidad, que aún sigue transmitiendo, pide refuerzos.
Los tres helicópteros lanzan hasta tres bombas de lacrimógeno al mismo tiempo.
Integrantes de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) reparten vinagre, leche y coca cola entre sus compañeros que se encuentran en las barricadas.
Este es el día en que Oaxaca sufre, respira y observa la represión de las fuerzas federales.
Radio Universidad convoca a vecinos e integrantes de la APPO a salir a las calles, a llevar cohetones: "Es la lucha por el último bastión, el universitario", dicen.
El lacrimógeno llueve, tres helicópteros bombardean la glorieta de Cinco señores, a más de 200 metros de la universidad. La población resiste... Oaxaca es irrespirable.
Mujeres y hombres con cubetas de agua corren de un lugar a otro, mientras el sonido de las hélices es el preludio para que el operativo, para recuperar la ciudad universitaria, se lleve acabo
Los helicópteros sobrevuelan por lo menos a 200 metros. Periférico y La Noria son el escenario.
“¡Zapata vive!”, miles de pobladores lo gritan, cuando retoman la glorieta de Los Cinco Señores. El helicóptero espera a que al oblación enardecida se junte.
Después, más de 20 bombas de lacrimógeno caen, son arrojadas a ese punto.
Tras el enfrentamiento, está confirmado que un integrante de la APPO murió tras el impacto de una bomba de gas lacrimógeno.
Los helicópteros están arriba. Es una lucha, un enfrentamiento de arriba para abajo.
Aún la Universidad no ha sido tomada. “No lo vamos a permitir”, dice uno de los dirigentes de la APPO que no quiere dar el nombre.
Cientos de personas saltan, gritan, golpean postes.
Hasta las 15:03 la Universidad no ha sido tomada.
“¡No aguantaron. Sí se pudo!”, gritan cientos de integrantes del magisterio y de la APPO que golpean postes, cortinas, como señal de triunfo.
“¡No aguantaron, tenían que ir al baño!”, dice un hombre con el pañuelo empapado de vinagre y coca cola.
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